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martes, 26 de enero de 2016

¡Desayuna como rey, come como príncipe y cena como mendigo!


Un gran porcentaje de alumnos asiste a clases sin tomar su desayuno, siendo esto de gran importancia en los adolescentes para obtener de esta comida principal, la cantidad de energía que necesitaran para centrar su atención en las clases, evitar distraerse con el hambre, caer en el desanimo, trataran de comer algo en el salón o pedirán permiso para salir del aula he ir a comprar algo de comer; esto tiene como consecuencia que el alumno no entienda el tema y no aprenda nada.


La nutriologa Ana M. González quien trabaja en "Alimetría" recomienda que en preescolar un niño debe consumir 1300 calorías diarias, es decir que en el desayuno deben consumir 228 y 239 calorías. En primaria 1500 calorías diarias, el desayuno debe incluir de 276 a 290 calorías. Y en secundaria los jóvenes deben consumir 2182 calorías al día, entonces en el desayuno tienen que consumir de 382 a 400 calorías. 

Los niños que van a la escuela sin desayunar, pueden tener problemas, que en ocasiones ni los padres de familia ni los maestros se dan cuenta o piensan que no tienen relación con la alimentación de los alumnos; pero el no desayunar afecta al estudiante de la siguiente manera:

  • Bajo rendimiento escolar.
  • Pierden la atención en las primeras horas de clase.
  • Puede sufrir de mareos, dolor de cabeza, visión borrosa o cansancio.
  • Obtienen bajos resultados en materias que necesitan mayor concentración como matemáticas.
  • Pueden sufrir de obesidad, si consumen alimentos poco energéticos y comida chatarra. 
  • En ocasiones son etiquetados como malos estudiantes por no poner atención o dormirse en la clase.
  • Los chicos se vuelven nerviosos e intranquilos y esto puede ocasionar que los maestros consideren que son alumnos mal educados. 



Ante este problema real ¿Cuál sería la solución? A continuación algunas recomendaciones:

Antes de ir a la escuela el chico puede consumir aunque sea un vaso de leche, un licuado, un vaso de avena o una bebida de chocolate que le permita poder aguantar hasta la hora del recreo o receso para ingerir un desayuno que lo complemente. 

Para complementar el desayuno, deben llevar un lunch para que coma en el recreo, y los alimentos que puede consumir a esta hora pueden ser:



  • un sándwich (de jamón, pollo, huevo o queso, con rebanadas de tomate y lechuga)
  • una fruta 
  • un jugo, un malteada de chocolate, licuado de alguna fruta que al chico le guste o agua natural en vez de refresco. 
  • ensalada de frutas o ensalada de verduras
  • una barra de granola o fibra, galletas.
  • ensalada de atún. 
  • rollitos de jamón, queso en cuadritos.




¡Una buena alimentación ayudará a que los alumnos aprendan mejor!


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